Bueno, ¿qué puedo decir? Chatear por Internet ha dado lugar a algo increíble. Siempre tenía mis dudas en cuanto a que personas de distintos países pudieran iniciar una relación sentimental. Sin embargo, cuando chateé por primera vez con Zoltan, empecé a darme cuenta de que era perfectamente posible. Congeniamos muy bien desde el principio y aprendí mucho sobre él y su país natal. Zoltan tiene una gran personalidad y la conversación con él era muy entretenida. No tardamos mucho en empezar a compartir nuestros sueños y deseos.
Zoltan decidió viajar para venir a verme, y me fascinó que fuera un hombre tan decidido y proactivo. Debo admitir que ambos estábamos bastante nerviosos durante nuestro primer encuentro. Reservamos para comer en un restaurante superbonito, y allí charlamos durante horas y nos conocimos mejor. Fue muy buena oportunidad para comprobar si había química entre nosotros y si nos complementábamos bien para algo serio. Zoltan es todo un caballero y fue muy atento conmigo en todo momento. Durante nuestra primera cita el tiempo pasó muy deprisa y no dejamos de charlar ni un minuto. Realmente aquella oportunidad nos sirvió para confesarnos todo lo que rondaba por nuestros corazones.
Marina y Zoltan